domingo, 3 de julio de 2016

Sintomas de la diabetes


Alimentación de amebas


¿ Que son las amebas?

las amebas son protista unicelular del género Amoeba. Es un protozoo caracterizado por su forma cambiante, puesto que carece de pared celular, y por su movimiento ameboide a base de pseudopodos, que también usa para capturar alimentos a través del proceso llamado fagocitosis Las especies de este género viven libres en agua o en tierra, alimentándose de organismos más pequeños o de partículas en descomposición. Debido a la facilidad con que se obtienen, pueden guardarse en laboratorios, ya que son objeto común de estudio.
La especie más famosa es Amoeba proteus que mide 700/800 um de longitud, pero otras especies son mucho más pequeñas. Estas amebas poseen un solo nucleo celular,  una vacuola contráctil que mantiene su presión osmótica, y vacuolas digestivas con las que procesan el alimento. Existen muchas otras especies y géneros de amebas, algunas de las cuales parasitan el intestino del hombre o de los animales.
Morfología:
  • Las amebas tienen la estructura típica de una célula eucariota presentando citoplasma y nucleo y diversos orgánulos. El citoplasma se divide en una masa central granular denominada endoplasma y una capa externa más clara llamada ectoplasma. Los elementos más reconocibles en la ameba son el nucleo y la vacuola contráctil que emplea para mantener la presión osmótica. Esta vacuola recibe el agua en exceso de la célula y periódicamente se une a la membrana citoplasmática para expulsar el agua al exterior. Las vacuolas digestivas reciben el alimento una vez ingerido y lo digieren.
  • Las amebas se desplazan extendiendo el citoplasma hacia afuera, formando prolongaciones similares a tentáculos, conocidos como seudopodos o falsos pies. Los seudópodos se utilizan también para envolver el alimento en un proceso conocido como fagocitosis.
  • Cuando las condiciones son desfavorables, las amebas pueden formar quistes, etapa de reposo en la que la ameba se encierra en una bola segregando una pared protectora. El quiste puede sobrevivir a condiciones ambientales mucho más duras que la ameba original. La célula permanece en estado durmiente hasta que las condiciones se vuelven más favorables. Dentro del quiste la célula se divide varias veces por mitosis, de forma que cuando el quiste se abre, salen varias amebas hijas.